Torsos destruidos,
por el horror y la guerra.
Vientres danzantes
ahuyentando la tormenta.
Cariátides del pasado
sosteniendo el panteón
del horror.
Mi espíritu vagó
por lejanos siglos,
buscando la muerte,
y no la encontró.
Renació en otras vidas
y contempló mil cadáveres amados.
Mi espíritu polvoriento
en el letargo,
persigue el amor,
amor eterno y huidizo
agónico, sin tus manos mudas.
Grabado: Xilografía "Elipsis"
Renació en otras vidas
ResponderEliminary contempló mil cadáveres amados.
¡¡Un poema profundo!! ¡¡Te mando un beso inmenso!!
Cariátides del pasado sosteniendo mundos de ausencias y horror...Prestas palabras que parecen describir el dolor de la pintura
ResponderEliminarMuchas gracias Leonardo por tus siempre bienvenidas reflexiones de mi obra!! También te envío un beso inmenso!!
ResponderEliminarAsí es amiga una poesía con obra expresionista que reflejan la profundidad de sentir, un abrazo!
ResponderEliminarHermosa alegoría la de tu poema. Y muy exquisita composición con tu grabado. Mira que decía el escritor español Ramón Gómez de la Serna, "quiero para mi muerte que lloren todas las cariátides de la ciudad". Un abrazo!
ResponderEliminarMe encanto la estrofa que citas de Gómez de la Serna y adoro las cariátides, en la fachada del Congreso tenemos unas maravillosas, muchas gracias Soledad por tus hermosos comentarios y un abrazo!
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